¿Te ha pasado algo increíble por lo que estás agradecido?
Claro que sí, ha todos nos han pasado cosas maravillosas por las que podemos dar las gracias, basta mirar atrás para darnos cuenta todo lo que hemos pasado y avanzado en la vida y ese es un motivo de agradecimiento.
La mayoría de las veces pensamos, <<hay es que a mi nada bueno me pasa>>
¿no es la vida lo suficientemente buena para estar agradecidos? ¿o acaso no quieres vivir? No existe nada tan malo como para que te sientas con ganas de estar ausente en la lista de este mundo, no importa que tan difíciles estén las circunstancias, que si sigues aquí es porque solo tú estás capacitado para llevar a cabo la misión de tu vida.
¿Cómo sentirse agradecido?
No es tan difícil mirar a tu alrededor y hacer tres inhalaciones profundas de aire fresco, una vez que hayas realizado esa sencilla tarea entonces estarás listo para observar todas las maravillas que esta tierra te brinda sin que tengas que hacer el mas mínimo esfuerzo, por ejemplo, el aire, el sol, la luz eléctrica, el agua y entre muchas otras. Ahora, imagina que ninguna de estas existiera ¿Te lo imaginas?
Estamos acostumbrados a dar todo por hecho y la verdad es que estamos aquí por gracia de Dios, por un milagro divino porque la vida misma es un milagro. Hay una frase que me encanta decirle a mis amigos “Da las gracias por lo que hoy tienes para que mañana puedas llegar a ver los frutos de ese agradecimiento”
Tal vez no te sientes cómodo en tu trabajo, o tu coche se llena de agua cuando llueve, el dinero no te alcanza para terminar el mes y no te gusta la casa en la que vives porque es muy pequeña. Con el tiempo me he dado cuenta de que siempre hay a quien le gustaría tener el trabajo que tienes y ganar el dinero que ganas, alguien que le gustaría vivir en esa casa pequeña y tener la familia con la que vives. Hay dos maneras de aceptar lo que tenemos en la vida, lo aceptas con entusiasmo y agradecimiento o sin el. Lo que nos pasa es que siempre ponemos nuestro foco de atención en lo que nos falta o creemos que nos hace falta y la verdad es que, así como estás eres perfecto y tienes lo necesario para cumplir tu objetivo en el mundo. El agradecimiento es un hábito como cualquier otro, enfócate en todo lo maravilloso que ya tienes y verás como todo comienza a tener más sentido y eventualmente esas cosas que crees que te hacen falta llegarán a ti o simplemente pasarán a un segundo plano.
Asegúrate de hacer una lista y escribir en una hoja de papel, libreta o lo que tengas tres cosas por las que estás agradecido. Si logras hacer esto todos los días verás el inmenso cambio positivo que impactará tu realidad actual, no basta con levantarte y expresar tu agradecimiento, ya que es necesario que pienses y analices cuales son esas cosas por las que sí puedes dar gracias. Esto te traerá un sentimiento de paz y felicidad en el que te podrás refugiar cada vez que tu voz interna comience a decirte mentiras así como, no puedes ser feliz si estás solo, si no te has graduado, si no consigues pareja, si no tienes dinero y no se cuantas cosas más. La clave está en agradecer lo que ya tenemos. No te acostumbres a ver tu carro aparcado en el garaje de tu casa porque no saves si mañana va a estar ahí, a saborear la cena que prepara tu esposa, los gritos de tus hijos corriendo por toda la casa, el tráfico, las responsabilidades en el trabajo, etc. Agradece que formas parte de todo esto porque significa que estás capacitado para llevar todas estas tareas a cabo con responsabilidad. Comienza a ver lo bueno y agradece lo que tienes a pesar de cual sea tu situación. Levántate en la mañana con un corazón alegre, siéntate en la cama y sonríe contigo mismo, expresa tu gratitud y tomate unos segundos para escribir tus intenciones para este nuevo día. Aunque tal vez ahora no estés en tu mejor momento no significa que las cosas nunca vayan a cambiar, recuerda que todo es temporal y aún hasta los días de lluvia llegan a su final. En el tiempo bueno se agradecido por el gozo y las alegrías que han llegado a tu vida y en el tiempo malo también se agradecido por las experiencias y el aprendizaje que ha llegado a tu vida. Hay un tiempo perfecto para todo, pero en todo tiempo mantén un corazón fielmente agradecido.
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